23.12.10

Cuando se apaga la luz...

Cuando se corta la luz hay una serie de eventos que es muy común que ocurran, al menos en mi casa siempre es asi. A veces se dan en etapas y otras (cuando ya la situación no te sorprende) salteas algunas y vas directo al grano.

La primera: la "infaltable puteada" , sobretodo si es que estas viendo una película o teniendo de esas charlas extensas que nunca tendrían que darse por msn, pero la realidad es que ya casi nadie habla por teléfono.

La segunda etapa se llama "recuentro con el vecino" y puede variar entre: una llamada por teléfono a ese vecino con el que solo entablas una conversación en este tipo de situaciones y le preguntas si a el también se le corto la luz; o mi preferida: reencuentro en la vereda con todos los vecinos mirándose unos a los otros (o mejor dicho las casas) para corroborar que estén todos en la misma.

La tercera me enerva y también tiene un nombre "Edesur y yo" donde marcas 0800-3-333787 infinitas veces y preguntas: "¿que paso? ¿cuanto va a durar?". Las preguntas son entendibles, pero a veces es mejor no calentarse en llamar y pasar a la ultima etapa, la que hace de un corte de luz, una noche especial (ah, me olvidaba...cuando se corta de día es una poronga y te estancas en la etapa 3).

A la mejor y ultima etapa le pondría "Vivir como Amish y ser feliz": es cuando te resignas a que vuelva la luz, prendes todas las velas de la casa y te quedas tirado en el piso filosofando con tu familia (o al menos sabiendo algo sobre el día de cada integrante). Esta etapa es variable, la comunicación puede llevarte a peleas, o a darte cuenta de lo poco que sabes de esa gente que vive con vos.

Esta situación de silencio y unión es simplemente genial y a veces muy útil. Bah, no creo ser la única loca que mas de una vez protesto cuando volvió la luz.*

*tampoco es que me guste dormir con 40ºC de sensación térmica.

18.12.10

Punta Carrasco, no voy a ir.

Están invitados a ver el vídeo...es demasiado relajante y vacacional.


y me voy cantando:

Te invito al paraíso de los perros...ah ah ah...para conocernos...mejor...

3.12.10

Un domingo de aquellos



San Telmo se vuelve un rojo bermellón, la batucada esta por terminar su recorrido. Una estatua de carne y hueso repite su obra al compás de una moneda caer. Una milonga callejera en la plaza central mueve las piernas de esos cuerpos antiguos que nunca se olvidaron de como bailar.

Vos, yo y ese muchacho que pide fuego interrumpiendo la conversación mas de una vez. Increíble! El desnivel de piso le enseña a nuestra mesa a bailar. Pasan los minutos y finalmente llegan los vasos, el mozo y la cuenta final.

Se vacían los vasos mas rápido de lo que esperábamos, no queremos pero nos tenemos que levantar, San Telmo se queda sin fuego para el muchacho, sin nuestra ágil conversación. Esa mesa deja de bailar, como también esas personas en la plaza central.

Se cierra el Telón...