Blanco y Negro

"Fui llevado a un instituto frenopatico y en un descuido del personal, pude leer la epicrisis de historia clínica"

"De acuerdo a ella era un maníaco depresivo, con alucinaciones e ideas delirantes. Asocial en mi comportamiento comunitario, agresivo en mis ideas y no podía emitir juicios de valor con sentido razonable."

"El motivo de mi desequilibrio siquico se remontaba a mi gestación y aun a mis ancestros. Y las conclusiones eran lapidarias. Pese al tratamiento, re recuperación era imposible."

"No leí ni espere mas tiempo. De un salto me encarame a una ventana abierta al exterior y me arroje al vacío."

"Mientras caía pude todavía pensar que no había leído nada que fuera un atenuante para mi deterioro genético y formativo. Nada se decía del medio social, del mundo circundante."

"Nada de la envidia, ni de la codicia, la artera mentira; la historia vendida por hombres astutos que pescan, carnada por medio, la boca sedienta del hombre mediocre; nada de la palabra hueca del sucio político, asqueante y ridículo; de la valla insalvable para aquel que piensa y es la presa fácil de absurdas censuras, que enormes desgracias augura, si se rompen moldes o sus ataduras; nada de los que mataron en guerras sin nombre y que hoy son historia llena de laureles, con espada sucia; nada de los pobres que engordan la tierra donde crece el trigo para que alimente las mesas servidas de los mercaderes; nada del travesti o de las lesbianas que en el escenario, drogas en la sangre, profanan la bella conjunción del sexo; nada a la violencia que doquier impera, imponiendo a punta de cañón su idea; nada del cobarde que aceptando todo, hablando en voz baja nunca se rebela; nada del arroyo que sediento espera de la luvia pura, que del cruel deshecho de la industria impura pronto lo libere; nada de las aves que asoladas huyen, callando sus trinos, del encierro injusto; nada de los bosques que talados mueren y bajo el hacha férrea que sus troncos hiere."

"Yo solo era el causante de mi propia ruina, un monstruo amorfo en un "mundo perfecto""

Fragmento del cuento Blanco y Negro (1979) de Nestor Raul Tagliabue, mi abuelo.

Mas allá de mis vagos e infantes recuerdos, de su voz ya silenciada, de su personalidad solo relatada por testigos de su indiferencia, de sus vicios y sus sueños...hoy pude conocerlo y no por lagrimas de mi abuela, ni por traumas de mi papa, ni por esas frases citadas de las cuales todos tienen memoria. Hoy, como si fuera poco, conocí su palabra, su creación y su pensamiento.